>>Te explico esta nueva técnica que está revolucionando las agendas de las lashistas.<<
Durante años, muchas profesionales de las extensiones de pestañas se formaron en técnicas clásicas como el una por una. Y aunque siguen funcionando, el mercado está cambiando… y las clientas también.
Hoy, lo que más se busca es volumen, diseño, durabilidad y naturalidad. Y ahí entra en juego una técnica que viene ganando terreno: el volumen tecnológico.
¿Qué es el volumen tecnológico?
Es una evolución en el mundo de las extensiones.
Usa fibras tecnológicas ultralivianas y resistentes, que permiten lograr looks mucho más sofisticados sin dañar la pestaña natural.
Se basa en un análisis detallado de la mirada, aplicando visagismo para personalizar el diseño según el rostro, los párpados y los ojos de cada persona.
Reduce el riesgo de caída prematura y mejora la comodidad para la clienta.
💬 En resumen: más duración, mejor estética y más satisfacción para quien lo lleva.
¿Para quién sirve esta técnica?
Si sos principiante, es ideal empezar con una formación que te enseñe esta técnica desde cero. Te posicionás mejor desde el comienzo.
Si ya tenés experiencia en el rubro, el volumen tecnológico es una excelente actualización. Vas a poder ofrecer un servicio premium, subir tus precios y diferenciarte.
¿Por qué está creciendo tanto?
Porque las clientas están más informadas. Ya no se conforman con cualquier extensión. Buscan algo que las favorezca, dure, no moleste y se vea profesional.
Y porque las profesionales que aplican esta técnica consiguen más fidelidad y mejores ingresos.
¿Dónde se aprende esto?
Si te interesa dominar la técnica desde la base, con explicaciones claras, guía paso a paso y soporte, hay una formación completa que incluye más de 55 clases enfocadas en volumen tecnológico, visagismo y desarrollo profesional.